Con el objetivo de regularizar el comercio informal en el Centro Histórico, este lunes el Municipio de Zacatecas y la Dirección de Transporte, Tránsito y Vialidad del Estado, implementaron un operativo para la reubicación de aproximadamente 12 comerciantes ambulantes que se ubicaban en la calle Arroyo de la Plata.

En este sentido, Alejandro Huízar Carranza, Tesorero Municipal, expresó que el proceso para regularizar el comercio informal “ha sido largo, pero hemos avanzado, rescatando más espacios públicos”, ya que se ha reubicado a un gran número de ambulantes de la avenida Morelos, las plazuelas de Vivac y Zamora, Independencia y calle Aldama, para posteriormente seguir con plazuela Genaro Codina y Arroyo de la Plata.

“Cada una de las acciones de este tipo que efectuamos son consensuadas con los comerciantes y vecinos de las zonas aledañas, ya que se realizan reuniones previas para negociar y llegar a acuerdos”, expresó el funcionario.

Además, agregó que siempre se han llegado a buenos acuerdos con los comerciantes, ya que se les brindan múltiples opciones para ser reubicados en otros lugares o mercados municipales para que puedan ofertar sus productos sin obstruir la vía pública, afectar a terceras personas, ni dañar la imagen urbana del Centro Histórico.

Por su parte, José Luis González Orozco, jefe del departamento de Inspección y Ejecución Fiscal del Ayuntamiento, puntualizó que ya se les había notificado con anterioridad a dichos comerciantes para que cumplieran con los requisitos que marca la ley, de lo contrario tendrían un plazo para dejar de vender sus productos en la calle.

También, dijo que “siempre ha existido una buena relación entre los comerciantes y las autoridades, hemos tenido acercamiento con ellos, ya que estamos dispuestos al diálogo, por ello realizamos reuniones previas para cualquier negociación”.

Por su parte, algunos comerciantes y vecinos de esta zona, que no quisieron revelar su nombre por miedo a represalias, expresaron su inconformidad con los ambulantes que se colocaban sobre esta calle a ofertar sus productos sin autorización.

“Todos tenemos derecho de ganarnos el pan, pero sin afectar a los demás; estas personas tenían un comportamiento prepotente, hacían mucho desorden; además de que ocupaban lugares de la vía pública que nos les correspondían, las personas no podían estacionarse porque los ambulantes ocupaban todos los cajones de estacionamiento”.