Zacatecas, Zac.,  29 de Noviembre de 2012.- La estructura sindical del SUTSEMOP calificó como grave y lamentable las declaraciones de Héctor Cruz Landeros, Presidente Magistrado del Tribunal Local de Conciliación y Arbitraje (TLCyA), quien manifestó a un medio de comunicación que “las votaciones se celebraran pues son legales”;  porque nos agrede al existir un Juicio de Nulidad y el Tribunal a priori prejuzga sin que a la fecha haya habido un laudo o resolución de ese juicio.

Así lo manifestaron en rueda de prensa varios Secretarios Seccionales y el Comité Ejecutivo Estatal del SUTSEMOP, y agregaron: Nosotros seguimos el curso, precisamente por eso señalamos que la declaración del Presidente del TLCyA es tendenciosa, ya que no está apegada al procedimiento que nosotros estamos llevando ante los órganos federales, este juicio aún no concluye.

De tal manera que esa declaración le corresponde una denuncia penal a quien resulte responsable; situación que se está valorando. Cruz Landeros le faltó el respeto a los 115 compañeros que promovieron un juicio de nulidad, porque los minimizó con su declaración. Está es otra de las actuaciones tendenciosas que realiza el TLCyA.

Los Delegados Seccionales reafirmaron las decisiones tomadas en asambleas de no participar en las votaciones del 30 de noviembre, aún y cuando continúan las presiones y las amenazas por parte de funcionarios de primer nivel para inducir la votación, acto que violenta la autonomía sindical.

Añadieron “es una decisión de la base trabajadora, con el respaldo de actas de asambleas de trabajadores, donde la base trabajadora solicita un proceso de elecciones apegado estrictamente a lo que marca la normativa interna, no se está negando a un proceso de elecciones”.  

Sobre el Colegio Electoral señalaron que continua cometiendo irregularidades, pues en la conformación de las casillas han entregado oficios que incluyen a personal de contrato, de confianza y hasta jubilados, lo que demuestra una falta de estructura para desarrollar las elecciones, y sobre todo la participación de personas ajenas al sindicato, que solamente buscan frenar el desarrollo del sindicalismo y la democracia interna.