
Ciudad de México.- En el marco del Día Mundial de la Madre Tierra, la senadora Geovanna Bañuelos enfatizó que la educación ambiental, la promoción de energías limpias, el uso responsable de agua y la protección de áreas naturales deben ser ejes rectores de la agenda nacional.
En tribuna, la vicecoordinadora del Grupo Parlamentario del Partido del Trabajo (GPPT) señaló que el Estado mexicano tiene una responsabilidad ineludible y la defensa del medio ambiente debe ser prioridad nacional que contemple una transición energética justa, dejando atrás los combustibles fósiles sin afectar el empleo y el bienestar de los trabajadores.
“Necesitamos frenar la deforestación y la contaminación de ríos y mares, impulsar una agricultura sostenible, garantizar el acceso equitativo al agua y sancionar con firmeza los crímenes ambientales”, aseveró la legisladora.
En este sentido, Geovanna Bañuelos mencionó que el Día de la Tierra no debe ser sólo una fecha en el calendario, sino un punto de inflexión hacia un nuevo modelo de vida, un modelo en armonía con los ciclos naturales, con respeto a la diversidad biológica y cultural con la firme convicción de que un futuro ecológico justo y colectivo es posible si se trabaja en conjunto.
“El día de hoy estamos conmemorando el Día Mundial de la Madre Tierra, y esta fecha nos invita no sólo a reflexionar, sino a actuar con responsabilidad sobre la profunda crisis ambiental que enfrenta nuestro planeta”, apuntó
Por ello, la líder petista anunció la presentación de una iniciativa de reforma integral a la Constitución para reconocer y establecer los derechos de la naturaleza.
“No habrá justicia social sin justicia ecológica. No habrá paz duradera sin una relación armónica con la naturaleza. Por la vida, por la dignidad y por el planeta, sigamos luchando”, subrayó.
Geovanna Bañuelos mencionó que en los últimos años el impacto de la actividad humana sobre los ecosistemas ha sido devastador; la deforestación, la contaminación, la pérdida de biodiversidad y el cambio climático son amenazas a la estabilidad del planeta y la supervivencia de millones de especies, incluyendo a los humanos.
“En México esta realidad se hace patente en la sequía que azota a diversas regiones, en la contaminación de ríos y mares, en los incendios forestales y en la desigualdad que viven muchas comunidades rurales e indígenas, quienes ven amenazada su forma de vida por el deterioro ecológico”, detalló.
Por ello, Geovanna Bañuelos hizo un llamado urgente a replantear la relación entre el ser humano y la naturaleza, una relación que por siglos ha estado marcada por la explotación desmedida, la indiferencia y la desigualdad.