Con toros que entraron al quite de la ganadería titular que inicialmente eran de Arroyo Zarco, se realizo la quinta corrida del serial taurino. Con poco menos de media plaza; alternando en el cartel Antonio Romero como primer espada, Juan Pablo Sánchez, como segundo y en este orden Arturo Saldivar.

Antonio Romero vestido de Azul Turquesa y oro, con su primero de la tarde de nombre “Majo” y 490 kilos, un toro falto de bravura que le hizo pasar malos momentos; bien con el capote intercalando Verónicas, “chicuelinas” y “tafalleras” cubriendo el segundo tercio con un toro Agarrado al piso. Ya con la muleta y con mucha voluntad Romero le arranco lo poco que traía el ejemplar de la ganadería de la Venta del Refugio.

A tres años de la alternativa Romero ha toreado poco a comparación de sus dos alternantes, habrá que analizar qué es lo que está pasando con su administración actual. Con su segundo de nombre “Cabano” y con 517 kilos. Romero sufrió dos volteretas, siendo la primera en el segundo par de banderillas, con la muleta la segunda que después de entrar a matar, fue a la enfermería de la plaza y de ahí al hospital ya que al parecer, llevaba en su anatomía un puntazo. A un así Antonio Romero es querido en su plaza y por su gente.

Juan Pablo Sánchez, joven espada hidrocálido, vestido de Azul Turquesa y oro, con su primero de la tarde de nombre “Prócer”, con 513 kilos De lámina; Verónicas rematando con torera media. Tandas de derechazos cambiándose la muleta por la espalda aplicada al ejemplar de Venta del refugio que bravura le falto, además carente de estilo a la hora de acometer a la multa mandona de Sánchez. En conclusión, fue una faena de inteligencia y de poder. Una estocada entera un tanto caída pero de efectos tajantes. Petición de oreja, hay quedo.

Con su segundo de nombre “Camarero” y 479 kilos que el público rechazo desde su salida, tal vez por nulo trapío y que el ejemplar por ser pequeño de lámina y de cabeza se llevo la rechifla. Sánchez se fajo bien la taleguilla y a base de poder le arranco los pocos muletazos que su enemigo traía pegándole tandas de “dosantinas” con las zapatillas bien clavadas en la arena, completando el circulo a el toro que a pesar de de embestir poco, era noble en su acometidas, desplantes valientes.

A la hora de entrar a matar y echar el cuerpo por delante, el toro lo pescó de la ingle derecha rompiéndole en punto del vestido y que por poco le pega la cornada, solo quedo en un rayón que fue revisado por el cuerpo médico de la plaza. Una oreja para Sánchez.

Arturo Saldivar vestido de Tabaco y oro con su primero de la tarde de nombre “Minero” con 554 kilos. El mejor del lote y que Saldivar supo aprovechar, pegándole dos largas cambiadas. Con la multa le arranca dos toreros péndulos que el respetable le aplaudió, Saldivar tuvo la suerte de lidiar a un ejemplar efusivo y con trasmisión, el Matador mostro un toreo templado, y con sentimiento, con ganas de sobresalir en cada tarde, lástima que pincho con el acero, y adiós peludas.

Con su segundo de nombre “Llovedor” y con 466 kilos de peso, otro ejemplar que fue abucheado por el público, este correspondiente a la ganadería e Boquilla del Carmen. Un toro aplomado, sobre todo en el segundo tercio, ya con la muleta Saldivar le arranco algunos pases a base de sudar la ropa de torear con mucha voluntad torera y en plan de agradar. El animal no tenía mucho por no decir nada, así que Saldivar fue pronto por el acero y entrar a matar.

El triunfador de esta tarde Juan Pablo Sánchez con una oreja en la espuerta.       

FOTOS: Ricardo REYES. www.zacatecaswebnews.com.mx