Zacatecas, Zac.– En un esfuerzo por mantener vivo el patrimonio cultural de la entidad, este viernes, la Junta de Protección y Conservación de Monumentos y Zonas Típicas del Estado de Zacatecas realizó la reposición de la escultura del Indio Triste, en su sitio original, luego de que la pieza auténtica colapsara el 13 de septiembre pasado.

Rafael Sánchez Preza, titular de la Junta de Monumentos, explicó que la dependencia se dio a la tarea de rescatar los vestigios de los restos que quedaron de la escultura del Indio Triste original, a fin de restaurarlos y retornarlos a su lugar, pero debido al estado de la misma, se llegó a la conclusión de elaborar una réplica que ocuparía el anterior sitio, en la calle Juan de Tolosa 902, esquina con el Callejón del Indio Triste.

Ahora, la pieza original fue colocada en el Museo Zacatecano, luego de una restauración realizada a cargo de docentes y estudiantes de la Escuela de Conservación y Restauración Refugio Reyes, quienes realizaron la tarea desde octubre de 2015 a diciembre de ese mismo año, con recursos propios de la institución y aportaciones de los alumnos.

La elaboración de la nueva escultura corrió a cargo del artesano Félix Muro Arenas, quien cuenta con una amplia trayectoria en el área, como la restauración de la fachada de la Catedral en algunos elementos específicos.

Sánchez Preza dijo que el costo de la obra fue de 35 mil pesos, inversión absorbida en su totalidad por la Junta, en un esfuerzo por mantener viva la memoria de los zacatecanos, con respecto a las tradiciones de sus calles y callejones.

La pieza original del Indio Triste fue elaborada y colocada durante la primera década del siglo pasado por mandato de un artesano panadero de nombre Ramón Rosales, quien quiso hacer honor no sólo a la calle sino a su panadería, por lo que la mandó colocar justo en la azotea de la misma, convirtiéndose así en una escultura histórica de gran relevancia y significado para los zacatecanos.

El titular de la Junta de Monumentos agradeció las facilidades otorgadas al nuevo propietario del inmueble donde se encontraba la colapsada escultura, Salvador González, así como a los «Amigos del Patrimonio de Zacatecas», quienes dieron testimonio de la colocación de la pieza en la cornisa del inmueble.

Tras colocar la réplica, Sánchez Preza y el resto del equipo de la Junta de Monumentos se trasladaron a la Escuela de de Restauración para llevar la pieza original al Museo Zacatecano, nuevo lugar que alberga al Indio Triste.