-Pepe Saldívar debuta como bajista de Metamorféame

Guadalupe, Zac.– En una noche nostálgica y llena de memorias, Javier Bátiz y Metamorféame, dejaron buen sabor de boca entre el público guadalupense en la tercera noche de actividades de la Feria Estatal de la Virgen de Guadalupe en su edición 2023.

‘Los dioses ocultos’ que inmortalizara Caifanes y ‘Fin’ de Jaguares, fueron melodías que el público coreó sin parar, recordando los mejores tiempos de dos de los grupos más queridos por el público rockero.

Cuando la agrupación interpretó ‘Debajo de tu piel’, ‘Mátenme porque me muero’, ‘Nubes’, ‘Ayer me dijo un ave’ y ‘Detrás de ti’, fueron sin duda de los mejores momentos de la noche.

Sin encasillarse en los éxitos que consolidaron a Caifanes o a Jaguares, exploraron melodías de otros géneros musicales como ‘Te lo pido por favor’ de Juan Gabriel, que también arrancó suspiros y aplausos.

Casi para concluir con su presentación, Metamorféame interpretó ‘Aquí no es así’, una de las canciones más conocidas, e invitaron a Pepe Saldívar, Presidente Municipal de Guadalupe, Zacatecas, a subir al escenario y tocar el bajo con ellos, interpretando una canción emblemática: ‘Viento’.

La presentación de Metamorféame concluyó con la interpretación de ‘Célula que explota’ y ‘Afuera’, con lo que el público terminó de entregarse a la agrupación que los hizo recordar las mejores canciones de rock de ayer, hoy y siempre.

En tanto, con gran sentido del humor, Javier Batiz llenó el escenario de recuerdos con los mejores acordes de su guitarra y sus más grandes éxitos.

Entre anécdotas y canciones, el público asistente se quedó en el Jardín Juárez hasta que terminó su presentación después de interpretar ‘Qué me das tú’, y ‘Si estuvieras aquí’.

Al interactuar con el público, Bátiz no sólo complació las peticiones que le hicieron, sino que dedicó canciones y acordes a algunos de sus más fieles seguidores.

Por otro lado, la agrupación local, Caldo de Brujas también hizo lo propio al inicio de las presentaciones y conquistó al público guadalupense.

Nota: Karla Valdés, fotos Edgar Chávez y Ricardo Reyes